Muchos ciudadanos se preguntan por qué en ocasiones ven bomberos cortando o interviniendo un árbol en la vía pública. El talado y tronzado de la especie arbórea solamente se realiza, por parte de nuestro personal operativo, cuando está corriendo peligro de caer o cuando ya han caído y están obstaculizando la vía pública. Así mismo cuando ofrece riesgo a la vida o bienes de los ciudadanos.
Según el Jardín Botánico de la ciudad, así como los seres humanos tenemos problemas de salud en algún momento de nuestras vidas, también los árboles, en su crecimiento, van teniendo diferentes enfermedades y problemas, que son estudiados y atendidos por las entidades del Distrito para recuperarlos y evitar su corte, con acciones como el manejo integral de plagas y enfermedades, poda de raíces, podas aéreas, entre otros. Especies como el Eucalipto, las Acacias y las Cipreses, con el pasar de los años alcanzan un gran tamaño y en temporada de lluvias llegan a sobrecargarse debilitando sus raíces, terminando con su caída.
Desde el año 2014 hasta la fecha, las cifras por incidentes con árboles en la toda la ciudad han venido en aumento. Por ello las 17 estaciones de Bomberos Bogotá han estado siempre prestas a la atención de este tipo de emergencias, con el fin de mitigar cualquier tipo de riesgo que se pueda generar.
Solo en el primer semestre del presente año se han atendido 584 servicios de este tipo, y en el año inmediatamente anterior, se atendieron cerca de 1.500 casos. Las localidades más afectadas por estas emergencias son Chapinero, Suba, Usaquén y Engativá.
Por ello, es muy importante que la ciudadanía esté atenta a los árboles cercanos a los espacios cotidianos. Si estos presentan síntomas como raíces descubiertas, inclinación, ramas secas o pudriciones, se debe llamar de inmediato a la Línea Única de Emergencias 123 para activar el protocolo correspondiente.
Así mismo, y con el fin de prevenir emergencias mayores por la caída de árboles, la recomendación, sobre todo en tiempos de fuertes lluvias o vientos, es evitar estacionar autos debajo de los árboles o cerca de ellos, pues el fenómeno podría ocasionar volcamientos y caer en los bienes o integridad de las personas.
Cabe resaltar que en Bogotá protegemos el ambiente, por eso la última opción que tenemos para este tipo de vegetación, es su tala.